Comprobado está, que la llegada de los nuevos gobiernos resultan siempre vertiginosos y llenan de ansiedad a los gobernados; la era moderna de la política mexicana ha sentado las bases para que los individuos vaticinen como inminente la caída de las expectativas creadas por todos los candidatos en campaña.
Los políticos de hoy, algunos tienen a sus hijos estudiando en Inglaterra, funcionando sin un título profesional que legitime sus decisiones, otros los tienen interviniendo en las políticas públicas en los que sólo sus padres tienen facultades, por lo que las gestiones gubernamentales se ensucian y el futuro de los ciudadanos se nubla y se frustra.
Cumplidos los seis meses del gobierno de Luis Aurelio Michel, las cosas no pintan bien, la filosofía morenista se ha implementado bien pero para mal, si algo funciona, destrúyelo; si alguien sirve, elimínalo porque estorba; si es de otro color, apesta.
Ha quedado claro que las historias respecto a una supuesta enfermedad del profe parcen ser ciertas, mismas que no le permiten ver más allá de sus necesidades básicas de todos los días, por ello, se ha hecho aliados a personajes que en algún momento lo abandonarán para dejarlo con la carga de la culpa, con toda la responsabilidad de su irresponsabilidad. Personajes llegados de lejos y sin ningún arraigo en el pueblo que le garantice a los gobernados el compromiso que se necesita. En pocas palabras, no se quedarán después de desfalcar al municipio.
Salvador Llamas Urbina fue quien lo acompañó durante toda la campaña y quien se encargó de convencerlo de que sería su mejor aliado, pero a la distancia, la perspectiva ha cambiado, quienes hacemos la lectura completa, entendemos que los supuestos de nuestras fantasías lo colocan ya como el peor alcalde de la historia de Puerto Vallarta y todo por culpa de la estrategia armada por Llamas para destronar la imagen del alcalde y acallar la espuria facultad que utiliza el hijo para su cacería de ciudadanos, él también le estorba a Llamas. Menos burros, más olotes.
En Salvador Llamas dejó toda la responsabilidad, de todas las dependencias, sin ningún título universitario que le de legitimidad a lo que argumenta todos los días, sin ningún compromiso que le de tranquilidad a los vallartenses y todo por la triste necedad del profe de no tener a nadie más que le “ayude”. Por cierto, todavía le deben una lana a Lomelí.
Las preguntas son muchas, la mayoría ya las hizo magistralmente Luis Munguía, incluso sorprendiéndome a mi con su astucia para hacerlo parecer interesado en el bienestar de los vallartenses, aún sin ningún aliado del Movimiento Ciudadano o los apestados regidores de Morena que no comulgan con el Profe o que posiblemente han sido víctimas de las “triquiñuelas” de los súbditos de Llamas. Las peticiones de Munguía son legítimas, son las que todos le hacemos al profe. Por qué Llamas, con los antecedentes que tiene y sin la preparación necesaria es quien toma las decisiones en el rancho, por qué tiene tanta seguridad particular el director de una institución dedicada a la distribución pública del agua, por qué su seguridad se encuentra armada y ocasionalmente amedrenta a los ciudadanos sin existir provocación de ningún tipo, por qué Salvador Llamas acordona una glorieta en La Aurora para comerse “tranquilamente” unos tacos “Huichos”, por qué el profe confía tanto en él si es el principal sospechoso de la estrategia de maltratar la imagen del alcaldito. Esa y muchas preguntas nos saltan a la cabeza y Luis Munguía por fin logró convencerme un poquito de que le gira la ardilla de la cabeza.
Aún no responde Llamas, a pesar de no ser un tema mediático, sino legal, el asesor principal del alcalde debería responder a esas preguntas hoy o el alcalde tendrá que responderlas mañana en un juzgado, sobretodo ahora que ha hecho un nudo la situación cuando descubrieron que el escudo utilizado por Llamas para librarse de la denuncia de Munguía fue la ex novia del diputado, a quien hoy parece que la mandaron para enfrentar los señalamientos de Luis Munguía a Llamas. En pocas palabras, en el Seapal le dieron trabajo a la ex novia de Luis Munguía supuestamente para alentarla a enfrentar al regidor en los juzgados, en los medios y la sociedad, motivada por el adoctrinamiento que utiliza Morena y que vuelve miserable la cabeza de las personas.
Por cierto que la ex novia Luis Munguía ahora cobra un salario en la dirección administrativa del Seapal.
El nuevo escudo de Llamas mordió el anzuelo, la muchacha enredó su tema y se echó la culpa del desvío del dinero en el congreso del estado, considerando que las condiciones para recibir un salario en el legislativo jaliciense es firmas de manera cotidiana y personal en las oficinas legislativas, dos años pasaron mientras ella firmaba cada tres meses por su salario, sin ser obligada, se le depositaba a una cuenta bancaria que seguramente ella misma creó y ella misma manejó durante 24 meses, hoy, los argumentos que inculparían al ex diputado ya no sirven, porque no hay pruebas que evidencien que hubo abuso, que hubo coaxion o que la obligaron durante tanto tiempo. De lo que si hay pruebas, es que ahora ella responde a nuevos intereses, en el Seapal ha optado por jugar de la peor manera y operando para alguien que al final la deshechará por lo esteril de su plan contra Luis Munguía. Por otro lado, los dichos ahora tendrán que demostrarse y sostenerse, por lo que Salvador Llamas tendría que tener preparada una respuesta, primero, para defender a la muchacha hecha escudo y segundo, para defenderse él de las preguntas hechas por Luis Munguía.
¿Con base en qué sustenta Salvador Llamas su prepotencia, su arrogancia, su mitomanía?.
Desmadró los sindicatos del Seapal y del Ayuntamiento, responsabilizando al profe y mitigando la motivación de los trabajadores por Puerto Vallarta, se hizo de policías para que lo cuiden mientras realiza la peligrosísima tarea de distribuir el agua y administrar la caca de los patasaladas. Llamas inició hace un par de semanas una pelea contra quienes tienen muchos años trabajando en las cribas del río Ameca, los enfrentó con personal armado sin ninguna facultad para ello, involucró a elementos de la Marina en la peligrosísima tarea de cuidar instalaciones que él mismo tiene abandonadas como el pozo radial del Río Ameca. Seapal necesita plomeros, expertos en extracción de agua, no necesita elementos armados ni el involucramiento del area de reglamentos, ecología o bomberos del ayuntamiento en un tema en el que los de las cribas tuvieron primero el acceso a las conseciones del aprovechamiento de los recursos en la ribera del Ameca.
Salvador Llamas tendrá que demostrar que la obra realizada por él tiene los permisos necesarios para que el alcaldito no quede en ridículo de nuevo.
Llamas ha optado por utilizar la fuerza antes que la cabeza y utiliza la soberbia sobre la razón. Las obras hechas por el Seapal para desvíar el cauce del Ameca no tienen sustento legal firmado y sellado, son ilegales, al parecer sólo existe un “mensajito” en el que a Llamas le dan la anuencia al Seapal para realizar una obra ilegal que al final, le abonará consecuencias al alcalde y no al director del Seapal.
La invasión de predios y las amenazas no son necesarias cuando la razón es legítima, pero Llamas no la tiene y se muestra frustrado, enojado, altanero y autoritario. Ternurita.
Los problemas en el pozo radial están más relacionadas con la incompetencia de quienes trajo de su rancho para no sentirse solo; y es que sustituyó a los expertos en agua por sus cuates, expertos en las fiestas que se hacen en la playa durantre la madrugada, con policías y banda en vivo. Sí, hasta hay fotos.
Hablando de expertos en agua, traidos desde una supuesta universidad en Israel, un grupo de personajes llegaron desde allá para costarle dos millones de pesos al pobre alcalde pobre, a cambio de información que los que trabajan en el Seapal desde hace veinte años ya sabían, pero que no iban a compartir con un jefe al que no toleran y al que le desean verlo caer. Se dice que los expertos en agua no eran expertos en agua, sino especialistas en algo más parecido al espionaje que a la ausencia del agua, a mi no me crean. Abusados.
En fin, la alcaldía está en manos de Llamas y está incendiada, el profe tiznado y un hijo chingando. Besos.
Comments