Independientemente de la actitud lenta y vergonzoso del Profe Michel, no dejará de ser el alcalde de este hermoso destino, como jefe de jefes, debe ser respetado y tratado como el mero mero sabor ranchero.
No mamen con la cobertura que lee dan al alcalde. Está bien que sean aburridos sus eventos, pero es el jefe y debería María Roa destinar un fotógrafo con marcaje personal del alcalde.
La Comunicación Social del Profe es cada vez más triste, María de Jesús Roa se ha empeñado en avergonzarlo con fotografías más feas que las que publicaba yo en El Sol, sin embargo, la imagen del Seapal, operada desde la oficina de comunicación del ayuntamiento, he sido majestuosa, solo en comparación con la del profe, no significa que esté reconociendo algo que no es. En realidad la imagen del Seapal y de Salvador Llamas es igual de Pinche, nada más que allá abusan del mal gusto del director y la ignorancia del alcalde.
Jamás había visto una oficina de comunicación social trabajar sólo ocho horas y que mandaran a la riata al alcalde, porque es evidente que los eventos que el alcaldito tiene por la tarde, ya nadie va y se cubren con un celular, que, por cierto, es el más chafa de la comarca, conozco presos del penal de Ixtapa con mejores celulares.
A poco el alcaldito no merece la entrega total de sus trabajadores de comunicación social, a poco no se merece un fotógrafo digno que no sea su amigo, que sea su empleado como encargado responsable de promover su mejor imagen, a poco el Profe no se ha ganado, como alcalde, que su oficina de comunicación social que se gasta mucho dinero en medios garras le dediquen más tiempo a él que al director del Seapal. No la chinguen, las fotos del Chaneque están mejor producidas que las del alcalde.
A estas alturas, el fotógrafo personal del presidente no es nadie, son un chilaquil de pendejos que tomaron una cámara en octubre y los metieron a sacar la chamba como sea. Está bien que el alcalde tenga mal gusto y sea medio lento, pero es el alcalde y se merece la mejor atención, el mejor trabajo, la más recia de las entregas.
Y ni me voy a meter en los temas del discurso, que parece que se lo hacen sus enemigos y lo ridiculizan todos los días.
En fin, es muy su show, yo desde acá me divierto, quedan 917 días para que se vaya el profe, todavía es mucho tiempo para rectificar.
Si no pueden, me ofrezco a hacerlo, GRATIS. Por el bien de Puerto Vallarta.
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